RUMIANTES
Rumiante es un animal que digiere alimentos en dos etapas: primero los consume y luego realiza la rumia. La rumia consiste en regurgitación de material semidigerido, remasticación (que lo desmenuza) y agregación de saliva. Rumiantes son los bovinos, ovinos, caprinos, Giraffidae y cérvidos. Los camélidos y los équidos no están en esta categoría, pues carecen de las características de los verdaderos rumiantes: preestómago aglandular, cuernos, etcétera.
Cuando hablamos de los animales rumiantes son aquellos que, para digerir los alimentos, lo hacen en dos procesos diferentes, por un lado, toman los alimentos los ingiere y empieza lo que lleva el nombre por rumia. Este proceso consiste en la regurgitación de todo lo que se ha digerido, para volverlo a masticar, agregando en el proceso más saliva que ayude a una nueva digestión. De esta manera consiguen machacar y facilitar todo el proceso de digestión.
Para distinguir a un rumiante, además de ver si realiza este tipo de acción al alimentarse, también se pueden ver sus patas, por lo general todos ellos tienen tanto el segundo como el quinto dedo de un tamaño muy pequeño, mientras que el tercero y cuarto forman una sola pieza que se llama caña. Todos ellos carecen de dientes incisivos superiores, mientras que los inferiores tienen forma de espátula para triturar con mayor eficacia la hierba y hojas que comen.
Características
El aparato digestivo de los rumiantes se caracteriza por poseer varias divisiones: cuatro en bovinos, ovinos, caprinos y cérvidos. En sucesión continua desde el esófago hasta el duodeno, las cuatro cavidades son:
Rumen, panza o herbario.
Retículo, redecilla o bonete.
Omaso, libro o librillo.
Abomaso, Cuajar o estómago verdadero.
A este tipo de animales que se caracterizan por tener varias divisiones o compartimentos en el aparato digestivo también se les ha denominado como poligástricos.
El rumen, panza o herbario está unido con la segunda cavidad, e integran el retículo-rumen. Allí, para obtener energía, microorganismos (bacterias, protozoos y hongos) anaeróbicos fermentan el alimento que pueden utilizar: la fibra (especialmente celulosa y hemicelulosa).
Estas substancias fibrosas se degradan hasta glucosa. Las bacterias utilizan la mayor parte de la glucosa y generan ácidos carboxílicos volátiles, principalmente ácido acético, ácido propiónico y ácido butírico. Estos constituyen la principal fuente de energía de los rumiantes, ya que dentro de su organismo se absorben y se metabolizan.
Los microorganismos presentes en el rumen degradan el ácido fítico (fuente importante de fósforo vegetal), mediante las enzimas fitasas. En el abomaso, a los microorganismos ruminales, que en buena parte están constituidos por proteína de alta calidad, se les somete a digestión hasta aminoácidos y péptidos, que posteriormente son absorbidos en el intestino delgado.
Este proceso puede convertir proteína que no contenga suficientes aminoácidos esenciales en proteína completa, además de transmutar el NNP en proteínas útiles para el animal. La fermentación ruminal provee también al rumiante todas las vitaminas del complejo B, así como vitamina K. Por ello los rumiantes solo requieren en su dieta las vitaminas liposolubles A, D y E.
El sistema digestivo de los rumiantes se compone de:1
Boca
Lengua
Esófago
Estómago
Rumen
Retículo
Omaso
Abomaso
Hígado (glándula adjunta)
Páncreas (glándula adjunta)
Intestino grueso
Intestino delgado
Recto
Anus
Aparato digestivo de los rumiantes
Para analizar y explicar el aparato digestivo de los rumiantes, tienes que tener en mente el aparato digestivo de cualquier mamífero, en el que después del esófago, viene el estómago que es donde se produce la digestión, para más tarde pasar al duodeno y los intestinos. En el caso de los rumiantes, después del esófago van cuatro órganos o cavidades diferentes, los cuales se llaman, rumen, retículo, libro, y finalmente abomaso.
En el rumen es donde va a parar todo el alimento cuando se ingiere por primera vez. Es aquí donde ciertos microorganismos como bacterias y hongos van fermentando el alimento para que sea más fácil procesar todo cuando llegue al final de la cadena. La fermentación que realizan estas bacterias es muy fuerte, con grandes cantidades de ácidos.
Es en este momento cuando se devuelve el alimento a la boca del animal para que pueda descomponer todo lo comido mucho mejor, masticando y deshaciendo todas las partículas, ayudando a que la masa sea mucho más fina. Cuando esto ocurre se da paso gracias al retículo y al libro filtrando el agua y otras sustancias hasta que finalmente llega al abomaso o estomago verdadero donde ocurre la digestión de todo el alimento.
Estómago de los rumiantes
El estómago o abomaso de los rumiantes es prácticamente igual que el de cualquier mamífero, ya que es allí donde se procesan las proteínas. Anteriormente en las anteriores divisiones del estómago se había procesado toda la fibra que contenían los alimentos, pero es aquí donde se procesa todas las proteínas, secretando varios ácidos y enzimas que consiguen desmenuzar y convertir en partículas más pequeñas las proteínas, para una mejor absorción en el intestino.
https://es.wikipedia.org/wiki/Rumiante
http://www.animaleshoy.com/animales-rumiantes/
Cuando hablamos de los animales rumiantes son aquellos que, para digerir los alimentos, lo hacen en dos procesos diferentes, por un lado, toman los alimentos los ingiere y empieza lo que lleva el nombre por rumia. Este proceso consiste en la regurgitación de todo lo que se ha digerido, para volverlo a masticar, agregando en el proceso más saliva que ayude a una nueva digestión. De esta manera consiguen machacar y facilitar todo el proceso de digestión.
Para distinguir a un rumiante, además de ver si realiza este tipo de acción al alimentarse, también se pueden ver sus patas, por lo general todos ellos tienen tanto el segundo como el quinto dedo de un tamaño muy pequeño, mientras que el tercero y cuarto forman una sola pieza que se llama caña. Todos ellos carecen de dientes incisivos superiores, mientras que los inferiores tienen forma de espátula para triturar con mayor eficacia la hierba y hojas que comen.
Características
El aparato digestivo de los rumiantes se caracteriza por poseer varias divisiones: cuatro en bovinos, ovinos, caprinos y cérvidos. En sucesión continua desde el esófago hasta el duodeno, las cuatro cavidades son:
Rumen, panza o herbario.
Retículo, redecilla o bonete.
Omaso, libro o librillo.
Abomaso, Cuajar o estómago verdadero.
A este tipo de animales que se caracterizan por tener varias divisiones o compartimentos en el aparato digestivo también se les ha denominado como poligástricos.
El rumen, panza o herbario está unido con la segunda cavidad, e integran el retículo-rumen. Allí, para obtener energía, microorganismos (bacterias, protozoos y hongos) anaeróbicos fermentan el alimento que pueden utilizar: la fibra (especialmente celulosa y hemicelulosa).
Estas substancias fibrosas se degradan hasta glucosa. Las bacterias utilizan la mayor parte de la glucosa y generan ácidos carboxílicos volátiles, principalmente ácido acético, ácido propiónico y ácido butírico. Estos constituyen la principal fuente de energía de los rumiantes, ya que dentro de su organismo se absorben y se metabolizan.
Los microorganismos presentes en el rumen degradan el ácido fítico (fuente importante de fósforo vegetal), mediante las enzimas fitasas. En el abomaso, a los microorganismos ruminales, que en buena parte están constituidos por proteína de alta calidad, se les somete a digestión hasta aminoácidos y péptidos, que posteriormente son absorbidos en el intestino delgado.
Este proceso puede convertir proteína que no contenga suficientes aminoácidos esenciales en proteína completa, además de transmutar el NNP en proteínas útiles para el animal. La fermentación ruminal provee también al rumiante todas las vitaminas del complejo B, así como vitamina K. Por ello los rumiantes solo requieren en su dieta las vitaminas liposolubles A, D y E.
El sistema digestivo de los rumiantes se compone de:1
Boca
Lengua
Esófago
Estómago
Rumen
Retículo
Omaso
Abomaso
Hígado (glándula adjunta)
Páncreas (glándula adjunta)
Intestino grueso
Intestino delgado
Recto
Anus
Aparato digestivo de los rumiantes
Para analizar y explicar el aparato digestivo de los rumiantes, tienes que tener en mente el aparato digestivo de cualquier mamífero, en el que después del esófago, viene el estómago que es donde se produce la digestión, para más tarde pasar al duodeno y los intestinos. En el caso de los rumiantes, después del esófago van cuatro órganos o cavidades diferentes, los cuales se llaman, rumen, retículo, libro, y finalmente abomaso.
En el rumen es donde va a parar todo el alimento cuando se ingiere por primera vez. Es aquí donde ciertos microorganismos como bacterias y hongos van fermentando el alimento para que sea más fácil procesar todo cuando llegue al final de la cadena. La fermentación que realizan estas bacterias es muy fuerte, con grandes cantidades de ácidos.
Es en este momento cuando se devuelve el alimento a la boca del animal para que pueda descomponer todo lo comido mucho mejor, masticando y deshaciendo todas las partículas, ayudando a que la masa sea mucho más fina. Cuando esto ocurre se da paso gracias al retículo y al libro filtrando el agua y otras sustancias hasta que finalmente llega al abomaso o estomago verdadero donde ocurre la digestión de todo el alimento.
Estómago de los rumiantes
El estómago o abomaso de los rumiantes es prácticamente igual que el de cualquier mamífero, ya que es allí donde se procesan las proteínas. Anteriormente en las anteriores divisiones del estómago se había procesado toda la fibra que contenían los alimentos, pero es aquí donde se procesa todas las proteínas, secretando varios ácidos y enzimas que consiguen desmenuzar y convertir en partículas más pequeñas las proteínas, para una mejor absorción en el intestino.
https://es.wikipedia.org/wiki/Rumiante
http://www.animaleshoy.com/animales-rumiantes/
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